Los principales investigadores de España y Europa se reúnen estos días en Menorca para hablar de las potencialidades de un material revolucionario en diferentes campos científicos, que los últimos tres años ha generado la producción de 40.000 nuevos productos y que desde 2006 ha motivado 14.000 nuevas patentes. Se trata del grafeno, un alótropo de carbono presente en el grafito, que posee propiedades únicas y que puede tener infinidad de aplicaciones.
El investigador ICREA del Institut Català de Nanociència i Nanotecnologia, Stephan Roche, destacó las ventajas del grafeno, que permitirán innovaciones en campos como la biomedicina, la fotónica o la electrónica. Eso es, aprovechando propiedades como su mayor conductividad, tanto eléctrica como térmica, o su gran resistencia.
En la Unión Europea, España e Italia son los países más activos en cuanto al estudio y la implantación del grafeno en los procesos de producción. A modo de ejemplo, el grafeno se puede incorporar a materiales plásticos, para que sean flexibles pero irrompibles; puede ofrecer flexibilidad a elementos electrónicos e incluso a las placas fotovoltaicas; hacer que puedan ser conductores de electricidad materiales que no lo son (plásticos); incrementar las prestaciones de las baterías de litio; o conseguir que los supercondensadores adquieran rapidez y potencia, entre muchos otras aplicaciones, conocidas y aún por explorar.