EL PROFESOR QUEMADO
El colectivo docente por sus características particulares: carga de trabajo, relaciones interpersonales intensas, disrupción en las aulas o altas exigencias emocionales, es uno de los sectores más vulnerable a padecer riesgos de carácter psicosocial que a menudo se manifiestan en forma de estrés o síndrome del quemado (burnout).
Mientras que el estrés hace referencia a procesos relativamente breves, el burnout es considerado la consecuencia de una situación prolongada de desajuste entre las demandas y los recursos laborales. Además, el burnout implica el desarrollo de actitudes negativas hacia el trabajo y el estrés no necesariamente.
No obstante, tanto estrés como burnout son fruto de la falta de balance entre la demanda y la capacidad de respuesta del individuo considerándose una consecuencia emocionalmente negativa en el estado mental del trabajador.